Misión 2
Baja por las escaleras y rompe la puerta con forma de cara. Así llegarás a la primera zona de la cueva subterránea. Después, entra por la puerta A, acabando con unos cuantos Agonofinis que encontrarás en la zona; y por la B, para encontrar una fuente de Orbes Rojos y, además, la entrada a una nueva habitación secreta en una de las cajas de madera.
A continuación, ve a la puerta C del mapa y rómpela para desplazar la pared que te dará acceso a la siguiente zona. Hay una trampa en el suelo: al pisarla, caerás a una especie de foso y te atacarán varios Agonofinis. Cuando se desplace la pared, serás atacado en esta ocasión por diversos murciélagos, llamados Flambats.
Enemigo 4: Flambats
Son simples murciélagos, muy pesados, que abundan en áreas donde haya fuego. Les encanta lanzarse contra ti en plan suicida y, cuando te alcanzan, te aturden durante un instante y absorben algo de tu nivel de vida. En todo caso, lo mejor que puedes hacer cuando entres en una zona en la que les oigas revolotear, es disparar sin parar para finiquitarlos en la distancia, aunque aún no les veas. Mueren con facilidad, así que no temas gastar balas con ellos, que tienes munición infinita.
La puerta por la que continuar es la D, pero quizás quieras romper la puerta E para desplazar otra pared. Se abrirá un área nueva, donde podrás buscar la segunda trampa para dar con un pedazo de Orbe Azul y varios Orbes Rojos. Entra en D, para llegar a una sala con baldosas en el suelo. Se trata de un pequeño puzzle: cuando intentes salir por la puerta del fondo, ésta se bloqueará con un hechizo. Para romperlo, ve al centro iluminado de las baldosas. Algunas baldosas se levantarán, y entre ellas verás varias lámparas redondas. Tienes que destruir ocho de estas lámparas para encender las antorchas que coronan la puerta de salida. Cada vez que las baldosas vuelvan a su sitio, regresa al área central para que emerjan más baldosas y lámparas encendidas que destruir. En la siguiente zona, la salida estará bloqueada. Comienza yendo a la puerta F para encontrar un fragmento de Orbe Azul. Nada más recogerlo, entrará en escena un enorme bichejo llamado Savage Golem.
Enemigo 5: Savage Golem
Son muy lentos, pero si te acercas mucho, desplegarán sus pinchos. Cuando lanzan veneno, te infectan durante unos segundos. Permanece alejado y dispara desde una distancia prudencial. Si te decides por atizarles con la Espada, hazlo sin parar hasta que acabes con ellos. Si paras, tomarán represalias. Resulta arriesgado utilizar la Espada si hay más enemigos en el mismo lugar, ya que en cuanto otro te distraiga un momento, el Golem lo aprovechará para darte tu merecido.
Ve ahora a la puerta G y rómpela. Esto hará que se mueva una pared a tu espalda; y como la vez anterior, aparecerán algunos Flamebats. Fúndelos a balazos y ve hasta la nueva puerta, H. Una vez que rompas esta puerta, se abrirá el muro que hay al otro lado, y tendrás que luchar contra unos Pyromancers.
Enemigo 6: Pyromancer, Brontomancer y Auromancer
Si no te has encontrado con estos enemigos, no tardarás en hacerlo, porque frecuentan las habitaciones secretas. Ten cuidado, ya que pueden lanzar sus disparos de magia a cualquier punto del escenario en el que te encuentres, ya sea en suelo firme o en el aire. Además, los Pyromancers también pueden teleportarse a cualquier lugar si les dejas un par de segundos para formular sus hechizos. Son más peligrosos cuando hay varios juntos, porque mientras te ocupas de uno, los demás no pararán de lanzarte maldiciones, teletransportarse, etc. No obstante, la buena noticia es que sus barras de vida son muy pequeñas, y podrás acabar con ellos sin problemas.
Mientras les atacas, no pueden formular hechizos. Vamos, que una vez que coges a uno por banda, estará perdido si no paras de atacarle, ya que no podrá defenderse. Eso sí: sus “amigos” intentarán defenderle a toda costa...
Acaba con ellos y rompe la puerta I para continuar, recorriendo el pasillo que hay allí hasta alcanzar la lámpara redonda. Acércate a la caja de la izquierda y pulsa 
para encontrar una habitación secreta. Enciende la lámpara para abrir la puerta cerrada, J en el mapa. En la siguiente habitación, la puerta se bloqueará nada más entrar. Entonces, verás un Aerial Heart, pero antes de cogerlo tendrás que derrotar a varios Agonofinis, Pyromancers y los nuevos Goatlings.
Enemigo 7: Goatling
Esta especie de "carnero volador" es capaz de lanzar magias que pueden hacerte mucho daño. Por lo general, se colocan en los puntos más altos del escenario para concentrarse a gusto antes de lanzarte sus magias. Utiliza las Pistolas tan rápido como puedas contra ellos y, si te atreves y tus saltos dobles te lo permiten, algún espadazo aéreo tampoco te vendrá mal. Su comportamiento es muy similar al de las Puias, aunque sus ataques sean bastante más mortíferos.
En cuanto les hayas vencido a todos, podrás recoger el Aerial Heart y utilizarlo para subir volando hasta la puerta que hay más arriba. Para hacerlo, tendrás que transformarte en demonio, activando con 
el modo demoníaco. Si tu barra de poder demoníaco no está llena, puedes utilizar la fuente de energía que hay a un lado de la puerta. En cuanto a lo de volar, comprobarás que en realidad es bastante sencillo: en modo demoníaco, pulsa repetidamente el botón 
para batir las alas y conseguir ganar altura. Para descender planeando, deja de pulsar .